miércoles, 4 de febrero de 2015

Estaba una de esas tardes, con mi mente ya inconsecuente como de costumbre, pensándote.
Y bebiendo la explicación de cómo es que todo terminó tan rápido. 
Embriagándome con los recuerdos.
Estábamos recién aprendiendo a caminar y al día siguiente ya corriendo de la mano, queriendo escapar, juntos.
Pero que ese "juntos" terminó bien l e j o s, que era más probable juntar las decisiones de la mente y el corazón que a nosotros.
Que nunca estuvimos de acuerdo, ni siquiera para elegirnos.
Aunque fue fácil decir si al principio, y aún más el no negar nada después. 
Que era interesante, divertido, fuera de la rutina... Pero lo volvimos lento, aburrido, algo más del paisaje. 
Éramos esa sombra de los árboles, en vez de ser los pétalos de colores.
Luego, estaban esas veces en las que verde, verde y rojo, rojo. 
Entonces decidimos mezclar, y los colores juntos no se veían tan bien como al principio. 
Pero ahora que lo pienso, quizás no elegimos buenos colores para representarnos. 
Quizás yo no era ese verde, quizás yo era ese negro, y tú un plomo, quizás blanco. Quizás gris, azul, amarillo y toda la gama existente.
Pero que quede claro que fuimos lo que quisimos, solo que no lo llevamos tan bien.
Las decisiones las tomamos juntos, pero luego ese "junto" se fue separando, pieza por pieza. Entonces sin haberlo pensado antes, un muro del porte de nuestra ironía nos llenó por ambos lados.
Y por no poder vernos bien, nos quedamos con los recuerdos, con lo que éramos, y no lo que creamos juntos.
Empezamos a querernos en pasado y a olvidarnos un poco del presente. 
A amarnos de repente y no eternamente.
ahí fue cuando caímos
Caímos toda esa distancia que había creado nuestra mente insensata y la pared ya no estaba.
Entonces lo que vimos en ese momento no era lo que esperábamos. 
Tú eras diferente, y yo también.
Y porqué no, también nuestro alrededor. 
Vivimos un tiempo cegando a nuestro corazón con la vana esperanza de hacer las cosas bien, porque creímos complementarnos perfectamente.
Pero desde este lado de la historia, te puedo asegurar que nada es tan perfecto como lo dibujas y pintas con esos colores que aún piensas que éramos. Pero que si me haces caso, y me pintas de negro, volveré a ser la sombra y tú la parte importante de la historia.
Tal y como fue con el tiempo.

9 comentarios:

  1. Gracias por comentar mi blog! Vine a agradecertelo,y me encontré un blog lleno de contenidos que me encantaron! como este texto, que es una preciosa reeflexión acerca de las elecciones,a veces equivocadas,pero,siempre hechas desde el corazón!! Un abrazo.. y te sigo!

    ResponderEliminar
  2. Yo creo que el anhelo del bien es el guia que nos conduce a la felicidad..

    ResponderEliminar
  3. Diooooss me he sentido muy identificada!
    Me hago seguidora de tu blog desde ya!
    Un besazo <3

    ResponderEliminar
  4. A veces las historias "fugaces" deben quedarse en eso nada más y tenemos que saber dejarlas ir porque cuando los colores cambian de tonalidad o nuestra visión hacia ellos, se hace todo complicado.
    Te sigo yo también.

    ResponderEliminar
  5. A veces es como si se eligiera o se decidiera entre las nubes, en medio de la niebla, sólo que no creemos que estamos entre la niebla. Pero es la vida, hay que seguir y, en realidad hay pocas cosas que podemos llegar a saber, y tal vez una de ellas es que "eso" que buscamos (esa especie de eternidad que llamamos amor) es lo que hace que no seamos la sombra de un árbol sino pétalos de colores.
    Me gusta el recurso de la sinestesia.
    Yo también te sigo :)
    Un beso

    ResponderEliminar
  6. Me ha parecido un relato increíble por el final, que muchas veces nos cegamos y no nos damos cuenta de cómo es realmente la historia hasta que salimos de ella... Y es una pena que se aprovechen así de nosotros.

    ResponderEliminar
  7. Hay combinaciones simplemente abocadas al fracaso.
    Si algo tengo claro es que todo dura lo que tiene que durar, como bien dicen.. "segundas partes nunca fueron buenas" y que las personas cambiamos y no todo permanece como al menos quisiéramos.
    Pero supongo que se trata de eso, de encontrar la mejor mezcla, el color perfecto.
    Me has encantado.
    Un placer descubrirte, un abrazo muy fuerte :)

    ResponderEliminar
  8. Hay combinaciones simplemente abocadas al fracaso.
    Si algo tengo claro es que todo dura lo que tiene que durar, como bien dicen.. "segundas partes nunca fueron buenas" y que las personas cambiamos y no todo permanece como al menos quisiéramos.
    Pero supongo que se trata de eso, de encontrar la mejor mezcla, el color perfecto.
    Me has encantado.
    Un placer descubrirte, un abrazo muy fuerte :)

    ResponderEliminar
  9. A veces somos agua y aceite...

    Por cierto soy Pérfida
    Un saludo coleguita

    ResponderEliminar